sábado, 14 de abril de 2012

DIARIO DE UN PENSAMIENTO

RECORDANDO

Viendo fotos y recordando viejos tiempo, la semana Santa de hace un año, me encantó ese Domingo de Ramos. Desgraciadamente un chico se metió, pero... me equivoqué al elegir, soy humana.

Tengo tantos recuerdos.., momentos y salidas, contigo en mi cabeza, en mis pensamientos...
Ese Domingo de Ramos, en el que por acompañarme de traje, llevabas unos zapatos más pequeños del numero que calzas. No lo olvidaré era un 43. 
Ese día en Plaza de España, remando para mí, como un caballero, concentrado en hacerlo bien, para que fuésemos en linea recta, sin giros. Lo mejor nuestras risas, sobre todo cuando te confesé mi miedo al estanque.
Ese día en Boss, fiesta semáforo, creo recordar, al principio nos daba un poco de vergüenza bailar, pero finalmente bailamos.
Cuando nos sentamos bajo las escaleras de emergencias del insti.
Cuando un día de lluvia corrimos a comprar un paraguas en la Plaza de la Encarnación y al salir de la tienda, dejó de llover.
Cuando estábamos en PLN, porque habías ido a FNAC a comprar un CD.
Cuando paseábamos por el río. (De allí, una de nuestras mejores fotos).
Cuando me acompañaste al via crucis de hace un año y le hicistes fotos a un acólito de mi hermandad.
Cuando corrimos por la Plaza del Triunfo, para que pudieras coger el bus y no llegar tarde.
Cuando el Martes Santo de hace un año vinistes a verme y al no salir, nos fuimos corriendo a ver El dulce Nombre. 
Cuando fuimos a la feria y a pesar de mi negativa, nos montamos en la casa del terror, cuando querías bailar conmigo y me negué por vergüenza. Cuando de regreso de la feria, en el coche de tu madre, se rozaron nuestras manos...
Cuando te oí tocar por primera vez en El Cachorro y te regalé aquella pulsera. Esa pulsera cuyo significado solo conocemos ambos. 
Son tantas cosas vividas, tantos recuerdos en tan poco tiempo...
Tantos errores que he cometido desde entonces.., tanta, que al final te perdí para siempre. Y eso duele. Duele incluso pensarlo. Y todo porque te tengo mucho cariño y porque te quiero.
Y si no lo sabes es porque quieres negar lo evidente.  Aún así, te quiero loco. 

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