Mientras escucho una triste canción de Jazz, me pregunto "¿Cual es la verdadera razón de nuestra existencia?"
Los seres humanos, nacemos y morimos. Todos tenemos un destino final, uno que fué escrito hace años, siglos, quizás antes de nacer, incluso.
Ahora es cuando me doy cuenta, que lo verdaderamente hermoso de la vida, es lo que nos llevaremos en un futuro a nuestro destino final.¿De qué vale todo aquello que no podemos llevarnos? ¿Todo lo material? Quizás, nos acomode la vida, pero no nos hará felices. Lo que realmente importa es lo que nos llevaremos, recuerdos, experiencias vividas...
Mi destino final, puede ser dentro de años, de horas, de minutos o estar a la vuelta de la esquina.
¿De qué sirven las guerras, el odio, el rencor...? Yo quiero llevarme a mi destino final, lo mejor de este mundo, mis recuerdos, mi amor y tu sonrisa clavada en mi memoria.
Ahora sé, que es lo verdaderamente importante en este mundo, ahora sé por lo que debo luchar. Y debo de luchar para que cada segundo de mi vida tenga sentido, para anular aquello que no me ofrece nada bueno, ni hermoso. A partir de ahora, viviré buscando el significado de mi existencia, sabiendo que mi existir aportará algo a los demás. No quiero irme sin dejar recuerdos y menos sin llevarmelos.
Si consigo la felicidad, me iré con mi mejor sonrisa, esa que fastidia a unos y a otros encanta.
Mi verdadera razón de vivir a partir de ahora, seré yo. Mis tesoros; mis amigos, mi familia, mis recuerdos, mi felicidad y la que yo pueda dar.
Somos tan insignificantes en este universo, que pedir más sería egoísta.
Me llevaré las noches de estrellas más hermosas del planeta, la luna más redonda, el atardecer más rojo, el amanecer más fresco y toda la belleza que pudieron admirar mis ojos. A tu lado y sin tí. Me llevaré el amor más grande que jamás conocí.
Eso es lo que quiero llevarme a mi destino final, lo demás no importa, porque solo habrá final...
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