Lunes 11 de abril de 2011
¡Menudo fin de semana! Lo único que lamento es no haber ido a ver a mi amigo Oier, a Marbella. Han quedado en 2º puesto en las nacionales de rugby. ¡Enhorabuena chicos! Y un besito muy fuerte para el capitán, Oier Goia.
El domingo, estuve trabajando en casa, deberes, estudios, en fin, tranquila. Y eso significa pensar.
Estuve pensando en mí, (que ya era hora), en lo que he pasado en mi salud, ¿sabíais que mi próxima cita en el hospital, no es hasta el 14 de junio? Y si para entonces todo está normal, tendré el alta definitiva. Pensé también en el amor y en mil razones. Es muy fácil decir, “estoy loca de amor”, pero la verdadera locura llega, cuando buscamos la razón a ese amor. Eso es un poco lo que me pasó a mí. Busqué razones para amar y no encontré explicación. Cuando te enamoras, no hay razones lógicas, solo hay amor, cariño y deseos de estar con esa persona para siempre. Si no entendemos eso, es porque nunca hemos amado. Alguien dijo una vez, “hay un poco de locura en el amor, pero la verdadera locura está en la razón” y que razón tenía. El amor hay que vivirlo, disfrutarlo…, y quien no lo haga, se lo pierde, se pierde lo más hermoso que el ser humano ha tenido nunca.
Es una pena que el ser humano sea tan estúpido. Yo lo fui, fui una tonta por no disfrutar lo que se me regaló. Aprended de mis errores, porque conseguiréis la felicidad y el amor. Cosas que desgraciadamente escasean.
A Angelito, decirle que suerte en París y ya sabes, espero tu postal.
Y a J, bueno creo que ya te he dicho muchas cosas, algún día espero decirte lo que quieres oír. De momento, sigue con tu pulsera.
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